LA MUÑECA
Alemania
Comedia, Drama | 1919 | 68 min.
Alemán | Subt. en español
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DIRECCIÓN
Ernst LUBITSCH -
PRODUCCIÓN
Paul DAVIDSON -
GUIÓN
Norbert FALK, Hanns KRÄLY -
FOTOGRAFÍA
Alfred HANSEN -
EDICIÓN
Ernst LUBITSCH -
MÚSICA
Tobias SCHWENKE
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REPARTO
Pola NEGRI
Harry LIEDTKE
Leopold VON LADENGAST
PROYECCIONES
- DOMINGO, 12 - 16:30 | Cinemateca al Parque | Parque Altos de Serrezuela
- LUNES, 13 - 16:00 | Cinemateca de Bogotá - Calle Museo
SINOPSIS
El barón de Chanterelle está preocupado por la continuidad de su familia y encarga a un pregonero que busque candidatas matrimoniales para su sobrino Lancelot. Abrumado, el tímido joven huye a un monasterio. Cuando los monjes se enteran de la generosa dote, sugieren a Lancelot que para engañar a su tío se case con una muñeca. Pero después de la boda, la muñeca resulta estar más viva de lo que él esperaba...
¿POR QUÉ VERLA?
LUBITSCH llegó a afirmar que LA MUÑECA era la película favorita de su filmografía, cuando ya había conquistado Hollywood y era reconocido por sus sofisticadas comedias de costumbres. En LA MUÑECA, la excéntrica actuación de Ossi OSWALDA es el instrumento para revelar el machismo cotidiano y el ingenio ante la adversidad. Como parte de los Cine Conciertos del BIFF11, Daniel BRODERICK, DJ, compositor y productor musical con el sello Little Human Recordings, será el encargado de darle vida “sonora” a LA MUÑECA. Las funciones se realizarán con entrada libre en alianza con la Cinemateca de Bogotá: una en la Calle Museo de su sede principal y otro al aire libre como parte de una nueva edición de Cinemateca al Parque en el Parque Altos de Serrezuela en Usaquén.
DIRECCIÓN
Ernst LUBITSCH
Berlín (Alemania), 1892. Tuvo mucho éxito como cómico y pronto empezó a escribir y dirigir sus propias películas. Poco a poco, LUBITSCH abandonó la actuación para concentrarse en la dirección. Demostró el humor sutil y el virtuoso ingenio visual que con el tiempo se conocería como «el toque Lubitsch». A partir de entonces, Lubitsch alternó las comedias de evasión con los grandes dramas históricos, con los que cosechó un gran éxito internacional. Llegó a Estados Unidos en 1923. El éxito de LUBITCH en Hollywood fue asombroso. Su influencia crecía con cada producción, y su sofisticado estilo cómico fue ampliamente imitado por otros directores. En marzo de 1947 recibió un premio especial de la Academia (Estadounidense) por sus «25 años de contribución al cine». Murió más tarde ese mismo año. Se dice que en el funeral de Lubitsch, Billy WILDER suspiró: «No más Lubitsch», a lo que William WYLER respondió: «Peor que eso, no más películas de Lubitsch».
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